Rafaela, una joven hermosa de 33 años, de cabello rizado oscuro, alta 1.78 mts, con una hermosa figura y un prominente trasero, de busto normal y una personalidad un tanto alocada, residente de una de las selectivas residenciales de la capital.
Ludwin, un hombre atento de buen parecer, chapado a la antigua, de los que le abren la puerta a una dama, la uncia pareja que ha tenido Rafaela desde el colegio, donde se conocieron y dio inicio su romance, gracias a un juego de verdad o reto.
Recuerda, Rafaela recostada en el sillón, con su bata de dormir roja y sus pechos medios descubiertos, sin panty para proteger su sexo, en medio de la noche, sola en su casa de habitación con una copa de vino y una luz tenue, sonríe, ya que en ese juego fue donde por primera vez su cuerpo sintió las mariposas en el estómago acompañadas de una extraña sensación en su ser, la cual le decía que se despojara de su ropa, pues en su ingenuidad de adolescente, en aquel juego ella escogió reto, su reto fue encerrarse en la bodega del gimnasio del colegio junto con Ludwin por 30 minutos.
AL principio de los 30 minutos ambos con pena uno del otro no hacían nada más que verse y reírse, hasta que Rafaela se armó de valor empezó de hablar para que el tiempo pasara rápido. así empezaron a dialogar entre ellos contándose chistes, hablando de su vida, sus sueños y planes, la distancia empezó a disminuir entre ellos, incremento su contacto corporal, de pronto Ludwin fijo su miraba en los labios de Rafaela, como las películas dejo de escuchar y solo miraba el movimiento de ellos, en un impulso se acercó lo suficiente como para robarle un beso a Rafaela, atónita no supo que hacer y en lugar de alejarlo se terminó de acerca y respondió al beso de Ludwin.
Para ambos el tiempo se detuvo en ese instante y la intensidad del beso crecía segundo a segundo, sus cuerpos empezaron a desearse el uno del otro, las manos de Ludiwn recorrían suave y sin prisa toda la silueta de Rafaela, para ella todo esto era nuevo pues a pesar de tener un cuerpo bien desarrollo, nunca había sentido las caricias de un hombre, Ludwin por su parte empezó a sentir que su miembro empezaba a cambiar de tamaño y al mismo empezaba a mojar su ropa interior.
La respiración de Rafaela se empiezo a agitar, sus pezón de color rosa, sobresalieron por encima de su bra, sus caderas comenzaron a realizar movimiento involuntarios, sus manos pasaban por sus pechos, su sexo, sus nalgas se encontraba en un éxtasis de lujuria y placer, mientras continuaba ese beso apasionado, Rafaela bajo una de sus manos al sexo de Ludwin, mientras que con la otra acariciaba sus pechos, al sentir el sexo de Ludwin por encima de su pantalón, se asustó y retiro la mano, Ludwin rio pícaramente, y justo cuando se disponía a meter su mano dentro del panty de Rafaela, sus compañeros fueron abrirles la puerta para decirles que ya se habían cumplido los 30 minutos del reto.
Continuara (La gotita en la puntita 2)
Mente abierta, disfruto ver el rostro del placer de mi acompañante sentir sus palpitaciones aceleradas
